Maharaja Yudhisthira dijo, “Oh Janãrdana, ¿ cuál es el nombre del Ekadasi que ocurre durante la quincena clara del mes de Vaisãkha (Abril-Mayo)? ¿Cuál es el proceso para observarlo con propiedad? Ten la amabilidad de narrarme todo esto”.El Señor Sri Krsna replicó, “Oh bendito hijo de Dharma, ahora te describiré lo que Vasistha Muni una vez contó al Señor Rãmacandra. Por favor, escúchame con atención. El Señor Ramacandra le solicitó a Vasistha Muni, ‘Oh, gran sabio, me agradaría oír sobreel mejor de todos los días de ayuno; ese día que destruye toda clase de pecados y penas. He sufrido ya bastante por la separación de Mi querida Sita y así pues deseo que me digas como puede acabar Mi sufrimiento’. El sabio Vasistha replicó, ‘Oh Señor Rama, oh aquél cuya inteligencia es tan sagaz, simplemente por recordar Tu nombre uno puede cruzar el océano de este mundo material. Tú me has preguntado de modo de beneficiar a toda la humanidad y cumplir los deseos de todos. Ahora te describiré el ayuno que purifica al mundo entero. Oh Rama, ese día es Vaisãkha-sukla Ekadasi, que recae en Dvãdasi. Remueve todos los pecados y es famoso como Mohini Ekadasi (1). Verdaderamente, oh Rama, el mérito de este Ekadasi libera al alma afortunada que lo observa, de la red de la ilusión. Por consiguiente, si Tú quieres liberarte del sufrimiento, observa este auspicioso Ekadasi a la perfección, pues el mismo remueve toda clase de obstáculos del sendero individual y alivia de las mayores miserias. Ten la amabilidad de escuchar mientras te describo sus glorias pues para aquel que tan solo oiga sobre este Ekadasi auspicioso, todos sus pecados serán anulados. En las orillas del Río Sarasvati hubo una vez una hermosa ciudad llamada Bhadravani, que estaba regida por el Rey Dyutimana. Oh Rama, ese rey veraz, estable y altamente inteligente había nacido en la dinastía de la Luna. En su reino había un mercader llamado Dhanapãla, quien poseía una gran riqueza en granos alimenticios y dinero. También era muy piadoso. Dhanapãla dispuso que se excavaran lagos, que se erigieran arenas sacrificiales y se cultivaran hermosos jardines para beneficio de todos los ciudadanos de Bhadrãvati. También era un excelente devoto de Visnu y tenía cinco hijos: Sumãna, Dyutimãna, Medhãvi, Sukrti y Dhrsabuddhi. Desafortunadamente su hijo Dhrstabuddhi siempre se ocupaba en grandes actividades pecaminosas, como ser dormir con prostitutas y asociarse con personas degradadas. El disfrutaba del sexo ilícito, las apuestas y muchas otras variedades de gratificación de los sentidos. Faltaba el respeto a los semidioses, brahmanas, antepasados y demás mayores, así como a los invitados de su familia. El malvado Dhrstabuddhi gastó la riqueza de su padre indiscriminadamente, siempre ingiriendo alimentos intocables y bebiendo vino en exceso. Un día, Dhanapãla echó a Dhrstabuddhi de la casa tras verlo caminando del brazo de una prostituta. A partir de ese momento, todos los parientes de Dhrstabuddhi lo criticaron muchísimo y se distanciaron de él. Tras haber vendido sus ornamentos y haber sido destituído, las prostitutas también lo abandonaron y lo insultaron en mérito a su pobreza. Dhrstabuddhi entonces se llenó de ansiedad y también pasó hambre. Pensaba, ‘Qué haré ahora? ¿ A dónde iré? ¿ Cómo haré para mantenerme?’. Seguidamente, comenzó a robar. Los alguaciles del rey lo arrestaron, mas al enterarse de que su padre era el famoso Dhanapãla lo liberaron. Fué apresado y liberado en muchas ocasiones, pero finalmente el avieso Dhrstabuddhi fue apresado, esposado y luego golpeado. Tras azotarlo, los alguaciles de rey le advirtieron, ‘ Oh malvado! Aquí no hay sitio para tí’. No obstante, Dhrstabuddhi fue liberado de su tribulación por su padre e inmediatamente después se adentró en la espesura. Deambulaba aquí y allá, con hambre y sed, padeciendo muchísimo. Eventualmente comenzó a matar leones, venados, jabalíes y lobos para comer. En su mano siempre había un arco dispuesto a la acción, sobre su hombro el zurrón lleno de flechas. También mató a muchos pájaros, como ser cakoras, pavos reales, kankas, palomas y tórtolas. Mató sin vacilar a muchas especies de aves y animales y en tal sentido sus pecados aumentaban día a día. Debido a sus pecados previos, ahora estaba sumergido en un mar de gran pecado. Dhrstabuddhi estaba siempre ansioso y sintiéndose miserable, pero un día, durante el mes de Vaisãkha, por fuerza de algún mérito del pasado, llegó oportunamente hasta el sagrado ãsrama de Kaundiya Muni. El gran sabio acababa justo de bañarse en el Río Ganges y chorreaba agua. Dhrstabuddi tuvo la buena fortuna de tocar algunas de estas gotas que caían de las ropas del sabio. Instantáneamente Dhrstabuddhi fue liberado de la ignorancia y se redujeron sus acciones pecaminosas. Ofreciendo sus humildes reverencias a Kaundiya Muni, Dhrstabuddhi le oró con las manos juntas: ‘Oh gran brãhmana, por favor describe alguna clase de expiación que pueda yo realizar sin demasiado esfuerzo. He cometido muchos pecados en mi vida los cuales ahora me han empobrecido mucho’. El gran rsi replicó, ‘Oh hijo, escucha con gran atención, pues por oírme te liberarás de todos tus pecados remanentes. En la quincena clara de este mes, Vaisãkha, ocurre el sagrado Mohini Ekadasi, que tiene el poder de anular pecados tan vastos y pesados como el Monte Sumeru. Si tú sigues mi consejo y observas fielmente un ayuno en este Ekadasi, que es tan querido al Señor Hari, serás liberado de todas las reacciones pecaminosas de muchísimos nacimientos’. Al oír estas palabras, Dhrstabuddhi prometió con gran alegría observar un ayuno en Mohini Ekadasi, conforme a las instrucciones del sabio. Oh el mejor de los reyes, oh Rama, por ayunar completamente en Mohini Ekadasi, el una vez pecador Dhrstabuddhi, el hijo pródigo del mercader Dhanapãla, fue puro. Después obtuvo una hermosa forma trascendental y, libre al fin de todos los obstáculos, montó sobre Garuda, el transportador de Visnu, hacia la morada suprema del Señor. Oh Rãma, el día de ayuno de Mohini Ekãdasi remueve los más oscuros apegos ilusorios por la existencia material. En tal sentido, no hay mejor día de ayuno en los tres mundos’. El Señor Krsna concluyó, ‘Y así, oh Yuddhisthira, no hay sitio de peregrinaje, sacrificio o caridad que pueda dispensar un mérito igual a siquiera una décimo sexta parte del mérito que un devoto Mío fiel obtiene por observar Mohini Ekadasi. Y Aquel que oiga o estudie las glorias del Mohini Ekadasi, obtiene el mérito de donar en caridad mil vacas’. Así termina la narración de las glorias de Vaisãkha-sukla Ekãdasi o Mohini Ekãdasi del Kurma Purãna. Notas: 1. Si el ayuno recae en Dvãdasi, de todos modos es llamado Ekãdasi en las literaturas Védicas. Además, en el Garuda Purãna (1.125.6), el Señor Brahma declara a Narada Muni: Öh brahmana, este ayuno debe ser observado cuando hay un Ekãdasi completo, una combinación de Ekãdasi y Dvãdasi, o una combinación de los tres (Ekãdasi, Dvãdasi y Trayodasi) pero nunca en el día que se mezcla Dasami con Ekãdasi”.
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SB 5.19.27 satyaṁ diśaty arthitam arthito nṛṇāṁ naivārthado yat punar arthitā yataḥ svayaṁ vidhatte bhajatām anicchatām icchāpidhānaṁ nija-pāda-pallavam Palabra por palabra: satyam — ciertamente; diśati — Él ofrece; arthitam — el objeto por el que se oró; arthitaḥ — orado; nṛṇām — por los seres humanos; na — no; eva — en verdad; artha- daḥ — el que concede bendiciones; yat — que; punaḥ — de nuevo; arthitā — petición de una bendición; yataḥ — de nuevo; svayam — personalmente; vidhatte — da; bhajatām — a aquellos ocupados en Su servicio; anicchatām — aunque no lo deseen; icchā-pidhānam — que cubre todas las cosas deseables; nija-pāda-pallavam — Sus propios pies de loto. Traducción: La Suprema Personalidad de Dios satisface los deseos materiales del devoto que se dirige a Él con esa motivación, pero el Señor no concede bendiciones que puedan llevar al devoto a seguir pidiendo nuevas bendiciones. El Señor, sin embargo, brinda voluntariamente el refugio de Sus propios pies de loto, incluso si el devoto no tiene esa aspiración; ese refugio satisface todos los deseos. Ésa es la misericordia especial de la Suprema Personalidad de Dios. Significado: En el verso anterior se habló de los devotos que acudían a la Suprema Personalidad de Dios con motivos materiales, pero este verso explica cómo son salvados de esos deseos. El Śrīmad-Bhāgavatam (2.3.10) aconseja: akāmaḥ sarva-kāmo vā mokṣa-kāma udāra-dhīḥ tīvreṇa bhakti-yogena yajeta puruṣaṁ param «Tanto si estamos completamente libres de deseos materiales como si estamos llenos de deseos o deseamos ser uno con el Supremo, debemos ocuparnos en servicio devocional». De ese modo, los deseos del devoto se verán satisfechos, pero, además, llegará el día en que no tenga más deseo que servir los pies de loto del Señor. El que se ocupa en el servicio del Señor con alguna motivación recibe el nombre de sakāma-bhakta, y el que sirve al Señor sin ningún tipo de motivación es un akāma-bhakta. Kṛṣṇa es tan misericordioso que convierte al sakāma-bhakta en un akāma-bhakta. El devoto puro, el akāma-bhakta, que está libre de motivaciones materiales, está satisfecho simplemente con servir los pies de loto del Señor. Esto se confirma en la Bhagavad-gītā (6.22): yaṁ labdhvā cāparaṁ lābhaṁ manyate nādhikaṁ tataḥ: Quien se ocupa en el servicio de los pies de loto del Señor ya no desea nada más. Ésa es la etapa más elevada del servicio devocional. El Señor es tan bondadoso incluso con el sakāma-bhakta, el devoto con motivaciones, que satisface sus deseos de tal manera que, un día, llegará a ser un akāma-bhakta. Dhruva Mahārāja, por ejemplo, se hizo bhakta motivado por el deseo de conseguir un reino mejor que el de su padre, pero, finalmente, cuando se convirtió en un akāma-bhakta, dijo al Señor: svāmin kṛtārtho 'smi varaṁ na yāce: «Mi querido Señor, estoy muy satisfecho simplemente con servir Tus pies de loto. No deseo ningún beneficio material». A veces vemos que un niño se pone a comer algo sucio; sus padres entonces se lo quitan de las manos y le ofrecen sandeśa o algún otro dulce. A los devotos que aspiran a obtener bendiciones materiales se les compara con esos niños. El Señor es tan bondadoso que les quita los deseos materiales y les da la bendición más elevada. Por lo tanto, no se debe adorar a nadie más que a la Suprema Personalidad de Dios, incluso si se tienen motivaciones materiales; debemos ocuparnos por completo en el servicio devocional del Señor, de manera que todos nuestros deseos queden satisfechos y al final podamos ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Esto se explica en el Caitanya-caritāmṛta (Madhya 22.37-39, 41) de la siguiente manera: Anyakāmī - puede que un devoto desee algo diferente del servicio a los pies de loto del Señor; yadi kare kṛṣṇera bhajana - pero si se ocupa en el servicio del Señor Kṛṣṇa; nā māgiteha kṛṣṇa tāre dena sva-caraṇa - Kṛṣṇa le da el refugio de Sus pies de loto, aunque no sea esa su aspiración; Kṛṣṇa kahe - el Señor dice; āmā bhaje - «Él está ocupado en Mi servicio»; māge viṣaya-sukha - «pero desea los beneficios de la complacencia material de los sentidos»; Amṛta chāḍi 'viṣa māge - «Ese devoto es como una persona que pide veneno en vez de néctar»; Ei baḍa mūrkha - «Ésa es su necedad»; Ami - < - vijña - «Pero Yo tengo experiencia»; Ei mūrkhe `viṣaya' kene diba - «¿Por qué voy a darle a ese necio algo tan sucio como el disfrute material?»; Sva-caraṇāmṛta - «Sería mejor que le diese el refugio de Mis pies de loto»; `Viṣaya' bhulāiba - «Haré que olvide todos sus deseos materiales»; Kāma lāgi' kṛṣṇa bhaje - Si alguien se ocupa en el servicio del Señor para obtener complacencia de los sentidos; paya kṛṣṇa-rase - el resultado es que al final obtiene un gusto por servir los pies de loto del Señor; Kāma chāḍi `dāsa' haite haya abhilāṣe - Entonces abandona todos los deseos materiales y quiere ser un sirviente eterno del Señor.
Maharaja Yudhisthira dijo: “¡Oh, Vasudeva!, Te ofrezco mis humildes reverencias, por favor descríbeme el Ekadashi que ocurre en la quincena oscura del mes de Vaisakha (Abril - Mayo) incluyendo su mérito específico e influencia.” El Señor Sri KRSNA contestó: “¡Oh, rey!, En este mundo y en el próximo, el más auspicioso y magnánimo Ekadashi es Varuthini Ekadashi, que ocurre durante la quincena oscura del mes de Vaisakha. Aquel que observe un ayuno total en este sagrado día, sus pecados serán completamente removidos, obtendrá continua felicidad y toda buena fortuna. Ayunando en Varuthini Ekadashi hace que una mujer desafortunada se vuelva afortunada. Cualquiera que observe este Ekadashi se le concederá beneficios materiales en esta vida y la liberación después de la muerte. Este destruye los pecados de todos y salva a las personas de las miserias de repetidos nacimientos y muertes. Por observar este Ekadashi apropiadamente, el rey Mandhata se liberó. Muchos otros reyes también se beneficiaron por observarlo, reyes como Maharaja Dhundhumara de la dinastía Iskvaku, que se liberó de una lepra causada por una maldición del Señor Shiva que le había dado como castigo. Cualquier mérito que uno obtiene por ejecutar austeridades y penitencias por 10.000 años es dado a aquella persona que observa Varuthini Ekadashi. El mérito que uno logra por donar una gran cantidad de oro durante un eclipse Solar en Kurukshetra es obtenido por aquel que observa este ayuno de Ekadashi. De ese modo, el que observa este Ekadashi con amor y devoción, ciertamente obtiene sus metas en esta vida y la próxima.” En resumen, este Ekadashi es puro, muy vivificante y destructor de todo pecado. Mejor que dar caballos en caridad, es donar elefantes y mejor que donar elefantes es donar tierras; pero mejor que donar tierras, es donar semillas de sésamo y mejor que eso, es donar oro y mucho mejor que donar oro es donar granos alimenticios para todos los antepasados, semidioses y seres humanos que se satisfacen por comer granos. Por lo tanto, no hay mejor caridad, ya sea en el pasado, presente o futuro que ayunar en este Ekadashi. Incluso los brahmanas sabios han declarado que dar una joven doncella en matrimonio a una persona respetable es igual que dar granos alimenticios. Es más, el Señor Sri KRSNA, la Suprema personalidad de Dios ha dicho que dar vacas en caridad es igual que dar granos alimenticios. Incluso mejor que todas estas caridades es enseñar conocimientos espirituales a los ignorantes. Todos los méritos que uno puede obtener por ejecutar todos esos actos de caridad son obtenidos por aquel que ayuna en Varuthini Ekadashi. Alguien que viva a expensas de su hija, sufrirá una condición de vida infernal hasta la inundación del universo. ¡Oh Bharata!, Por lo tanto, uno debe ser muy cuidadoso de no usar las riquezas de su hija, o tomar dinero del hombre a quien entregó a su hija. ¡Oh, mejor de los reyes! Cualquier jefe de familia que trate de vender a su hija o tome dinero del hombre a quien entregó a su hija en matrimonio, tal jefe de familia nacerá como un miserable gato en su próxima vida. Por lo tanto se dice, aquel que quiera dar en matrimonio a una doncella como un acto sagrado de caridad, con varios ornamentos y buena dote, obtendrá méritos que no podrán ser descritos ni siquiera por Chitragupta, el principal secretario de Yamaraja en los planetas Celestiales. Sin embargo, ese mismo mérito puede ser fácilmente obtenido por aquel que ayuna en Varuthini Ekadashi. Las siguientes cosas que uno no debe hacer en Dashami, un día antes de Ekadashi son: Comer en platos de metal, comer cualquier clase de urid-dahl, comer lentejas rojas, comer garbanzos, come Kondo (un grano que es comido principalmente por personas pobres y que se parece a la semilla de amapola o semillas de argapanthas), comer espinacas, comer miel, comer en la casa de otra persona, comer más de una vez y participar en hacer sexo de cualquier clase. En el mismo día de Ekadashi no se deben hacer los siguientes actos: Juegos de azar, deportes, dormir durante el día, cepillarse los dientes, extender rumores, criticar, conversar con personas impuras, tener cólera y mentir. En Dvadashi, el día siguiente de Ekadashi no se deben hacer los siguientes actos: Comer en platos de metal, comer urid-dahl, lentejas rojas o miel, mentir, hacer deportes o trabajos pesados, comer más de una vez, hacer cualquier tipo de actividad sexual, afeitarse el cuerpo, el rostro o la cabeza, untar con aceite el cuerpo de alguien y comer en la casa de otra persona.” El Señor Sri KRSNA continuó: “Aquel que observa Varuthini Ekadashi se libera de toda clase de reacción pecaminosa y regresa a la morada espiritual. Aquel que adore al Señor Janardana en este Ekadashi y permanece despierto toda la noche también se liberará de todos sus pecados y podrá alcanzar la morada espiritual. Por lo tanto, ¡Oh, rey!, El que está temeroso de sus pecados y de sus reacciones y de la muerte misma, debe observar estrictamente Varuthini Ekadashi. Finalmente, ¡Oh, noble Yudhisthira!, El que escuche o lea esta glorificación del sagrado Varuthini Ekadashi, obtiene el mérito ganando de dar mil vacas en caridad y vuelve a casa, a la morada del Señor Vishnu. De esa manera termina la narración de Vaisakha - KRSNA - Ekadashi, o Varuthini Ekadashi del Bhavisya uttara - purana. NOTAS 1 - Dar granos en caridad es muy auspicioso. Una vez Maharaja Yudhisthira preguntó al señor KRSNA: ¡Oh, mi Señor!, ¿Cualquiera puede ir al Cielo sin ejecutar sacrificio o austeridad? El Señor KRSNA respondió: annadanvi jaladas aaiva aturas ca oikitsakah trividham svargam ayati vina yajñena bharatah “¡Oh, hijo de Bharata!, Aquellos que dan granos alimenticios, dan agua, o medicina a los necesitados van al Cielo sin ejecutar ningún sacrificio o austeridad.” (Mahabharata). También KRSNA dice en el Bhagavad-Gita (3.14) annad bhavant butan. “Todos los seres que subsisten de granos alimenticios, se dicen que son de la mejor calidad.” Sin embargo si la comida es prashada, comida santificada, preparada y ofrecida al Señor KRSNA con devoción, entonces esto otorga al recipiente la liberación de este mundo material. En la Bhagavad-gītā, el Señor aconseja: man-manā bhava mad-bhakto mad-yājī māṁ namaskuru. El sistema de yoga perfecto consiste en pensar siempre en Kṛṣṇa, ocuparse siempre en servicio devocional, adorar siempre a Kṛṣṇa y ofrecerle constantes reverencias. Si no practicamos ese sistema de yoga, nos será imposible abandonar el apego ilusorio por este cuerpo miserable, que está lleno de excremento y orina. La perfección del yoga consiste en abandonar el apego por el cuerpo y por las relaciones corporales, y en orientar ese apego hacia Kṛṣṇa. Estamos muy apegados al disfrute material; pero ese mismo apego, cuando lo orientamos hacia Kṛṣṇa, nos lleva por la senda de la liberación. Debemos practicar exclusivamente ese sistema de yoga.Haz clic aquí para editar. SB.5.19.15 sign El Señor Śrī Rāmacandra es tan bueno y misericordioso con Sus devotos que, sean o no humanos, Se satisface fácilmente con cualquier pequeño servicio que Le ofrezcan. Ésa es la ventaja especial de la adoración del Señor Rāmacandra; lo mismo ocurre cuando se adora al Señor Śrī Caitanya Mahāprabhu. El Señor Kṛṣṇa y el Señor Rāmacandra, en Su papel de kṣatriyas, a veces mostraban Su misericordia matando asuras, pero el Señor Śrī Caitanya Mahāprabhu otorgaba amor por Dios sin ningún tipo de dificultad, incluso a los asuras. Todas las encarnaciones de la Suprema Personalidad de Dios, y en especial el Señor Rāmacandra, el Señor Kṛṣṇa y, más tarde, el Señor Śrī Caitanya Mahāprabhu, liberaron a muchas de las entidades vivientes de Sus respectivas épocas, prácticamente a la totalidad; por esa razón, a Śrī Caitanya Mahāprabhu se Le representa en la forma de seis brazos ṣaḍ-bhūja-mūrti, que es una combinación del Señor Rāmacandra, el Señor Kṛṣṇa y el Señor Śrī Caitanya Mahāprabhu. Adorando esa ṣaḍ-bhūja-mūrti, la forma del Señor con seis brazos (dos de Rāmacandra, dos de Kṛṣṇa y dos de Śrī Caitanya Mahāprabhu), podemos cumplir el objetivo primordial de la vida humana. SB5.19.8 sign SB 5.19.5 martyāvatāras tv iha martya-śikṣaṇaṁ rakṣo-vadhāyaiva na kevalaṁ vibhoḥ kuto 'nyathā syād ramataḥ sva ātmanaḥ sītā-kṛtāni vyasanānīśvarasya Palabra por palabra: martya — como ser humano; avatāraḥ — cuya encarnación; tu — sin embargo; iha — en el mundo material; martya-śikṣaṇam — para enseñar a todas las entidades vivientes, y en especial a los seres humanos; rakṣaḥ-vadhāya — para matar al demonio Rāvaṇa; eva — ciertamente; na — no; kevalam — solamente; vibhoḥ — de la Suprema Personalidad de Dios; kutaḥ — de dónde; anyathā — de otro modo; syāt — habría; ramataḥ — de quien disfruta; sve — en Sí mismo; ātmanaḥ — la identidad espiritual del universo; sītā — de la esposa del Señor Rāmacandra; kṛtāni — que aparecen debido a la separación; vyasanāni — todas las miserias; īśvarasya — de la Suprema Personalidad de Dios. Traducción: Se había establecido que Rāvaṇa, el príncipe de los rākṣasas, sólo podía morir a manos de un hombre; por esa razón, el Señor Rāmacandra, la Suprema Personalidad de Dios, apareció en la forma de un ser humano. Su misión, sin embargo, no se limitaba a matar a Rāvaṇa; vino también para enseñar a los mortales que la felicidad material centrada en la vida sexual o en la propia esposa es causa de muchos sufrimientos. Él es la Suprema Personalidad de Dios autosuficiente, y para Él nada es digno de lamentación. ¿Qué otra razón podía tener para exponerse a las dificultades que siguieron al rapto de madre Sītā? Significado: Como se afirma en la Bhagavad-gītā (4.9), el Señor, cuando desciende en forma humana a este universo, lo hace con un doble objetivo: paritrāṇāya sādhūnāṁ vināśāya ca duṣkṛtām: proteger a los devotos y destruir a los demonios. Para proteger a los devotos el Señor les satisface con Su presencia personal, pero además les imparte Sus enseñanzas, para evitar que caigan del servicio devocional. Con Su ejemplo personal, el Señor Rāmacandra enseñó a los devotos que es mejor no entrar en la vida de casado, ya que ello trae consigo, indefectiblemente, muchas dificultades. Esto se confirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (7.9.45): yan maithunādi-gṛhamedhi-sukhaṁ hi tucchaṁ kaṇḍūyanena karayor iva duḥkha-duḥkham tṛpyanti neha kṛpaṇā bahu-duḥkha-bhājaḥ kaṇḍūtivan manasijaṁ viṣaheta-dhīraḥ Kṛpaṇa es la persona que no es avanzada en cuanto a conocimiento espiritual; es, por lo tanto, lo contrario de un brāhmaṇa; los kṛpaṇas por lo general entran en la vida familiar, que es una licencia para la vida sexual, y de ese modo disfrutan del placer sexual una y otra vez, aunque ese disfrute viene seguido de muchas dificultades. Con esto se quiere advertir a los devotos. Para enseñar esta lección a los devotos y a la sociedad humana en general, el Señor rī Rāmacandra, a pesar de ser la propia Suprema Personalidad de Dios, Se sometió a una serie de dificultades que se debieron al hecho de haber aceptado una esposa, la madre Sītā. Por supuesto, el Señor Rāmacandra llevó a cabo esas austeridades con la única finalidad de instruirnos; en realidad, para Él nunca hay motivos de lamentación. Otro aspecto de las instrucciones del Señor es que quien acepta a una mujer por esposa debe serle fiel y brindarle plena protección. La sociedad humana se divide en dos clases de hombres: los que siguen estrictamente los principios religiosos, y los que son devotos. Con Su ejemplo personal, el Señor Rāmacandra quiso instruir a ambos tipos de hombres, enseñándoles a someterse por completo a la disciplina del sistema religioso y a ser esposos cariñosos y responsables. Aparte de esto, no tenía ningún motivo para pasar por esas dificultades aparentes. La persona que siga estrictamente los principios religiosos no debe dejar de proveer a su esposa de todo lo necesario para que esté perfectamente protegida. Esto puede causar un cierto sufrimiento, pero, aun así, debe hacerse. Ése es el deber de un esposo fiel, como demostró el Señor Rāmacandra con Su propio ejemplo. El Señor Rāmacandra podría haber producido cientos de miles de Sītās a partir de Su energía de placer; pero, con la única finalidad de mostrar el deber de un esposo fiel, además de rescatar a Sītā de las manos de Rāvaṇa, mató a Rāvaṇa y a todos sus familiares. Otro aspecto de las enseñanzas del Señor Rāmacandra es que ni el Señor Viṣṇu, la Suprema Personalidad de Dios, ni Sus devotos tienen nada que ver con las dificultades materiales en que aparentemente se encuentren. Son mukta-puruṣas, personas liberadas, en toda circunstancia. Por eso en el Caitanya-bhāgavata se dice: yata dekha vaiṣṇavera vyavahāra duḥkha niścaya jāniha tāhā paramānanda-sukha El vaiṣṇava siempre está firmemente establecido en el plano de la bienaventuranza trascendental, debido a que está ocupado en servicio devocional. Aunque aparentemente esté pasando por sufrimientos materiales, en realidad se encuentra en una posición que se define como bienaventuranza trascendental en separación (viraha). Las emociones que los amantes sienten cuando se separan el uno del otro, aunque parezcan dolorosas, en realidad están llenas de felicidad. Por consiguiente, la separación del Señor Rāmacandra de Sītādevī, así como las dificultades que tuvieron que pasar por esa causa, no son sino una muestra de felicidad trascendental. Ésa es la opinión de Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura. SB.5.19.5 Haz clic aquí para editar. |
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